miércoles, 1 de abril de 2020

¡Crítica social 2.0!

¡Buenas de nuevo, bloggers!

Me tenéis por aquí una semana más, esta vez con mi rol de crítica. Como ya sabéis es la segunda vez que desempeño este rol y por tanto ya sabéis un poco de qué va la tarea. Aún así os refrescaré la memoria: voy a hablaros sobre un tema de actualidad y voy a dar un poco mi opinión crítica con respecto al mismo.

Pues bien, ¡comencemos!

Dándole vueltas en mi cabeza a sobre qué tema de actualidad podría hablar, se me ocurrió hablar de uno de los temas más tabú en nuestra sociedad: la prostitución

Fuente: Pixabay 


Estamos hartos de ver en las noticias como cada día la policía desarticula redes y bandas de explotación sexual en España. Y sí, habéis leído bien, de explotación sexual. Y os preguntaréis si la prostitución y la explotación y trata de mujeres para fines sexuales es lo mismo. La respuesta es que exactamente no, pero la gran mayoría de mujeres que ejercen la prostitución lo hacen tras un fondo de explotación sexual y trata por parte de personas que sacan dinero y se aprovechan de ciertas situaciones. 
Bien, estas mujeres que ejercen la prostitución en la mayoría de los casos no lo hacen de forma voluntaria, si no que las obligan a hacerlo chantajeándolas o amenazándolas. Por tanto, la explotación y trata de mujeres finaliza en prostitución. Es como un proceso, un círculo vicioso que nunca termina a no ser que se deje de consumir el "producto" que en este caso son personas, MUJERES, con miedo, muchas de ellas con hijos, sin recursos y sin apoyo. Por tanto, mientras existan clientes que sigan demandando el servicio, existirá algo tan cruel y precario como lo es la prostitución. Mujeres a las que privan de sus derechos y libertades y venden su cuerpo sin dejarlas decidir.
Si me remito a la historia de la prostitución podemos encontrar otro problema, ya que cuando la prostitución comenzó a surgir en España, allá por los años 80, las mujeres que se prostituían eran en su mayoría españolas. Pues bien, en la actualidad esta situación ha cambiado de forma radical. La gran mayoría de mujeres que ahora se encuentran ejerciendo la prostitución son extranjeras. Y, ¿por qué digo que aquí surge otro problema? Pues porque aparte de todo lo que conlleva la prostitución, se une que muchas de estas mujeres no conocen el idioma, no tienen ningún tipo de apoyo familiar al que arrimarse, no tienen vivienda, no tienen recursos económicos... Es decir, por mucho que quieran salir de ese mundo, saben que no tienen a donde ir ni de que vivir y por eso muchas de ellas no dan el paso de dejarlo. 
Además, me gustaría añadir que muchas de las mujeres vienen engañadas,
Fuente: Pixabay 
pensando que en el país de destino, en este caso España, les espera un trabajo. Cuando llegan las venden como si fuesen mercancía para la prostitución.
Se trata de un tema muy serio al que no damos voz y que se esconde normalmente tras una cortina de humo por tratarse de un tema tabú como es el sexo.
El problema de todo esto es que cada vez chicos más jóvenes, incluso de 18 años recién cumplidos, consumen el servicio como si esto fuese un juego. No se si es debido a la desinformación o a la falta de valores de los jóvenes en la actualidad. Quiero pensar que si supieran las historias de las mujeres que están en esa situación, no se les ocurriría pagar al hombre que las explota sin escrúpulos y seguir contribuyendo a ese tipo de negocio.
Me parece una vergüenza que este tipo de temas no sean los que sirvan para que los adolescentes y jóvenes se formen en valores en el instituto. 
Sigamos impartiendo asignaturas de Lengua Castellana y Matemáticas y dejemos atrás el civismo y el respeto hacia la mujer o el ser humano en general, así llegaremos lejos.


¡ESPERO QUE OS HAYA "GUSTADO"!

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